Horacio Quiroga y los cuentos

¡Hola a todos! El otro día me paré a pensar que he recomendado más de una decena de novelas, pero hay más géneros literarios que he leído y de los que no he hablado. Por ello he decidido cambiar y traeros un cuento. Algunos pensaréis que no hay mucha diferencia entre uno y otro, craso error. Obviando la extensión, las novelas son claramente más largas, existen muchas otras diferencias: los cuentos no desarrollan tanto a sus personajes, el tiempo y el espacio, el final es mucho más sorprendente y en muchos de ellos hay una “doble historia”. Sí, en los cuentos se narran dos historias a la vez: la primera es la que se lee, la que nos cuenta el narrador; y la segunda está entre líneas, pistas que nos aventuran el final, dobles sentidos, etc. En la novela también puede existir este juego, pero al ser el cuento un formato tan breve es verdaderamente extraordinario cómo el autor esconde una historia secundaria que no aflora hasta el final.

No podía hablaros de este género sin recomendaros al gran Horacio Quiroga, cuentista, dramaturgo y poeta uruguayo considerado como el maestro del cuento latinoamericano. Hoy os traigo una de sus obras que a mí me parece una auténtica maravilla: «La gallina degollada» publicada por primera vez en Cuentos de amor de locura y de muerte en 1917. Pertenece al género de terror y os puedo asegurar que en menos de cinco páginas pone la piel de gallina, nunca mejor dicho. La historia trata de un matrimonio que tiene cuatro hijos con un tipo de retraso mental a causa de una meningitis que lo único que hacen es observar e imitar aquello que ven. Entonces nace la primera niña que no sufre de este mal y el matrimonio deja de atender al resto de hijos centrando toda su atención en la preciosa y perfecta criatura. Hasta aquí puedo contaros, recordad que solo tiene cinco páginas y con nada os acribillo a spoilers.

Historia y lenguaje sencillos para que hasta un niño de tres años disfrute con el cuento, aunque yo para niños menores de trece años sigo recomendado Pulgarcito y Peter Pan no vayan a quedarse con un trauma los pobres. Tenemos la falsa creencia de que los cuentos son solo para niños, pero Quiroga demuestra que los adultos también pueden disfrutar y vivir mil sensaciones con los cuentos. Os dejo el enlace a «La gallina degollada» para que lo leáis en menos de diez minutos y descubráis el mundo de los cuentos. Además, quiero con esta reseña recomendaros al autor, a Horacio Quiroga y su gran obra ya que nada de sus escritos tiene desperdicio.

Yo me despido ya, un abrazo y ¡Nos leemos pronto!